Consejos para visitar a un bebé recién nacido

Cuando un amigo, conocido o familiar tiene un bebé, la tentación inmediata es pasar a visitarlo para felicitarlo y para conocer a su hijo o hija. 

Aunque es un momento de mucha felicidad para los padres, no tomar ciertos recaudos podría hacer que el momento tan especial se convierta en estresante, pesado e incluso riesgoso. Por ello, en Blunki diseñamos una guía de recomendaciones para visitar a un recién nacido.

¿Cuáles son los mejores consejos para visitar a un recién nacido?

El primer consejo, y el más importante quizás, es no aparecer de sorpresa para visitar al bebé. Puede parecer obvio, pero siempre hay personas que por su confianza o su forma de ser acostumbran a llegar sin avisar. 

Aunque tengas esa confianza, en los primeros meses de paternidad y maternidad la organización es un poco caótica, los tiempos se adaptan de forma diferente, y por ello debemos preguntar antes de visitar para asegurarnos de que no somos un incordio si pasamos a verlos.

Otro consejo es que tengas en cuenta que la pareja lleva un cansancio lógico propio de las primeras semanas. Por lo tanto, es importante que programes tus visitas para que no duren más de 20 minutos y sean en un horario adecuado. Evitá las primeras horas de la mañana y las últimas de la noche.

¿Cómo comportarse al visitar a un bebé?

• El motivo de la visita es conocer al bebé. A pesar de que normalmente el invitado es el agasajado, es importante entender que en estas ocasiones el foco estará puesto en el recién nacido. Entonces, debés ir con intenciones de ayudar. Si les das una mano, tu visita puede ser realmente útil para los padres. Si estás esperando que te atiendan, podrías acabar siendo un estorbo.

• Respetar los horarios del bebé. Es importante que respetes los horarios de alimentación del bebé. No debemos interrumpir el tiempo en el que la mamá lo está alimentando, ni pedir que despierten al niño si al llegar está justo en una de sus siestas.

• Tampoco debemos insistir en sostener al recién nacido si no nos han sugerido esa idea. Tenemos que ser respetuosos con los deseos de los padres, ya que por su situación pueden estresarse con facilidad (especialmente si son padres primerizos).

• Si en algún momento llegan otros invitados, lo correcto es dar lugar a la visita nueva y abandonar la casa. No queremos sobreestimular al niño y debemos comprender que, en estas instancias, mucha gente va a querer visitar a los padres. Quedarse y hacer de nuestra visita una reunión social no es lo indicado.

¿Qué cosas están prohibidas en una visita a un recién nacido?

• Puede sonar obvio, pero nunca está de más aclarar que si estás enfermo, evitá las visitas a un recién nacido. Sus defensas son tan bajas que hasta una mínima tos podría generar susto. Por ello, debemos también lavarnos bien las manos cuando acudimos al hogar y hasta se sugiere, en ocasiones, no darle besos innecesarios al bebé. 

• Está, a su vez, prohibido fumar cerca de un bebé. Se aconseja evitar ir perfumado con aromas que pueden ser muy fuertes para él y podrían causar reacciones alérgicas o un rechazo que lo incomode.

• Otro elemento que está prohibido son las fotos con flash. Esto puede alterar al bebé. Antes de sacar una foto, recordá siempre pedir autorización. Aún cuando estemos seguros que no tienen problemas, ser predecibles y pedir permiso para cada situación permite a los padres relajarse respecto a su bebé con tu presencia.

Regalos para visitar a un recién nacido

Una práctica muy común en este tipo de ocasiones es llegar a la visita con un regalo. Aunque la tentación es comprar un peluche o algún juguete grande, debemos tener en cuenta que en los primeros meses el bebé no podrá jugar con muchos de ellos. Lo ideal es llevar alguna prenda de ropa o accesorio que ayude al cuidado del bebé. 

Si estamos con dudas, podemos consultar a los padres qué cosas precisan. En ocasiones, puede ser mucho más útil un juego de toallas o mantas especiales para bebés, que un inmenso peluche de elefante o de oso, con el que no podrá jugar hasta que no cumpla cierta edad.

Y no te olvides de tener un detalle con los dueños de casa, ya sea comida o algo que les alivie su tarea diaria, o algún regalo más sofisticado. A fin de cuentas, los agasajados a quienes queremos celebrar es a los bebés.

Conclusión

En conclusión, recordá consultar antes de ir de visita, hacé una visita corta y tené los cuidados previos necesarios antes de realizarla. 

Es lindo llevar un regalo, aunque sea un pequeño detalle, y respetá los tiempos y los pedidos de los padres. 

¡Con estas consideraciones ya estás listo para hacer tu visita!